El artista actuará el miércoles en Hard Rock Café acompañado de la banda chilena Christian Chávez Quartet, que incluye al bajista Christian Galvez, que, según Gambale, es uno de los mejores en la escena mundial.
El gestor nacional Pablo Paredes fue el que convenció al músico a contribuir en la formación de una nueva tendencia en eventos culturales en Bolivia. Una idea que atrajo el interés de Gambale, pues no conocía Bolivia, excepto por el folclore andino y la altura de La Paz.
Sus impresiones
En una habitación del hotel Buganvillas, el músico hace una pausa en sus múltiples estudios para comentarnos que hará una recopilación de sus últimos 25 años de carrera con sesiones rápidas, partes suaves, baladas, etc.
Toma su guitarra Carvin que fue fabricada especialmente para él y explica que su música proviene de la cotidianeidad. “De caminar por la calle, de ver un cuadro en un museo…”. “Lo importante para mí es que el público sienta algo cuando toco, si no siente nada, la música no sirve”, afirma.
Gambale grabó cinco discos con el pianista Chick Corea, una eminencia del jazz fusión, una de esas placas ganó un Grammy y otras dos fueron nominadas al premio. En 1990, Gambale lanzó Thunder from down under, lo que le valió el reconocimiento mundial. Y desde 1992 realiza giras por el orbe ofreciendo seminarios y masterclasses de guitarra.
Precisamente dictará mañana en Cochabamba una clase magistral de forma gratuita auspiciada por la embajada de EEUU. “Para mí es muy importante que las nuevas generaciones conozcan la potencialidad de la guitarra y que quieran alcanzar un nivel más alto. Mostrarle al joven que no solo está la guitarra pop, sino que hay toda una cultura guitarrista”, sostiene.
En la clínica ofrecerá aspectos más generales para intentar inspirar a los jóvenes a que mantengan una visión por alcanzar un nivel elevado en la interpretación. “En el caso de no volverse una estrella pop, es necesario conocer muchos géneros musicales para poder sobrevivir, porque eso es lo más importante para un músico, que su manutención provenga de la música, así evita trabajar en una compañía telefónica o en un restaurante, para dedicarse plenamente a lo que más ama. Esa es mi idea del éxito, no necesariamente volverte una estrella famosa”, sostiene Gambale.
“Cuando alcanzas un nivel técnico superior puedes hacer música para películas, videojuegos, para la radio, tocar en clubes, hay muchos caminos, lo importante es sobrevivir gracias a tu instrumento y tu capacidad”, añade el músico.
Una leyenda como él siempre quiere más, es por eso que actualmente está creando una escuela de música en línea, un proyecto con el que está muy emocionado. Esta iniciativa nació en sus múltiples viajes por el mundo, porque percibió que hay una carencia de información para los músicos en formación. Musicalmente, tiene un proyecto con la cantante Boca, que también es su esposa. Ella posee un registro vocal con puentes por los sonidos de pop, funk, y jazz.
Una leyenda como Frank tiene distintos ‘secretos’ como el peso de su guitarra, el material de sus cuerdas, su postura, pero él prefiere no llamarlos secretos, sino experiencia, un cúmulo de datos que solo se curten con trabajo
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